LA APASIONADA ETERNIDAD DEL INSTANTE

(Óleos de Ángel Piulats y Albert Corretgé, Maison du Curiste, del 16 al 31 de agosto)

por Rosario Curiel

Frente a la estafa del arte que se mueve vacío de conceptos, buscando argumentos que lo justifiquen ante marchantes, compradores y curiosos, se alzan de vez en cuando algunas obras que no necesitan más justificación que el gozo de ser contempladas. Tal es el caso de los cuadros nacidos del pincel de Albert Corretgé y Ángel Piulats.

Vitalistas por excelencia, paisajistas en esencia, estos dos pintores, que exponen sus óleos hasta el día 31 en la Maison du Curiste, son un magnífico ejemplo del goce del arte en su estado más puro. En sus obras no hay análisis ni psicoanálisis, no hay caos ni nostalgia de orden, no hay intentos de provocación que enmascaren una falta de oficio o una necesidad de ideas que quieran justificar la existencia de un cuadro. En sus telas respiran las pinceladas, a veces finas y fruto del cálculo, a veces rabiosos golpes de color, en una paleta que oscila desde el canon académico del equilibrio hasta la explosión expresionista del gozo hecho paisaje. Frente a la lejanía pétrea de unas montañas, la delicadeza de unas plantas apenas perfiladas; frente a un cielo tornasolado que sabe de lo fugitivo del tiempo, la tierra que a duras penas apresa luces y colores. A veces la mano testimonia que el ojo se fascinaba ante el infinito de una panorámica; a veces somos testigos de la sombra de un árbol, del fragmento de una casa, del detalle de una puerta. Todo es visto con la pasmada contemplación de quien sabe que el instante captado en la tela es único e irrepetible, puesto que todo paisaje es cambiante. De ahí la humildad del buscador de asuntos y lugares que traslucen las telas de Albert Corretgé y Ángel Piulats; de ahí la reverencia de quien mira como si viera por primera vez.

Es la sorpresa y la pasión por la vida hecha pintura la que asalta a quien contempla esta exposición, la captación del momento inverosímil en el que la realidad que se asoma al cuadro nos insufla el soplo de lo eterno en un instante

POUR DONNER À LA MAISON DU CURISTE-UNIVERSITÉ DU TEMPS LIBRE (PARC DES QUINCONCES-LUCHON 31110).

MERCI BEAUCOUP.